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El aire acondicionado nos salva en muchos momentos de calor durante el verano, pero también en momentos en los que la casa se queda congelada en invierno. Tener en modo calor tu aire acondicionado te ayudará a vivir un invierno más cómodo y acogedor en tu hogar. Pero no todo consiste en darle al mando y encender: normalmente, los aires acondicionados necesitan cierto mantenimiento para que rindan de forma óptima.

• Limpiar los filtros. Estas piezas se encargan de absorber partículas de polvo del ambiente, por lo que es necesario mantenerlos limpios. Necesitarás agua fría y dejarlos secar a temperatura ambiente. Lo ideal es hacerlo dos veces al año aproximadamente.
• Utilizar agua fría y nunca sustancia volátiles. Es importante que la limpieza de tu aparato la hagas con agua a una temperatura menor de 40º, así como no usar alcohol u otras sustancias volátiles, ya que pueden dañar la superficie de tu aparato.
• Limpieza del desagüe. Otra parte importante es el desagüe del split: un tubo fino por el que cae agua. Si no se limpia, el agua puede provocar malos olores y aparición de bacterias. Si observas algún defecto o problema en tu tubo, lo idóneo es contactar con un profesional, ya que podría hacer que tu aire acondicionado no funcione bien.
• Mantenimiento de unidad externa. Para el cuidado de la unidad externa -la que se ubica en fachadas o terrazas- es mejor consultar a un profesional. Él se encargará de eliminar el polvo y otros elementos que puedan interferir en el funcionamiento.