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Estamos tan acostumbrados a lo bueno, que a veces se nos olvida cómo sería nuestra vida si no tuviéramos todas aquellas cosas que ahora no valoramos. La electricidad es una de ellas. ¿Alguna vez has pensado todas esas cosas que no podrías hacer si no existiese? Te dejamos alguna que quizá ni te habías planteado.

• Conservar la comida. Todos sabemos que no podríamos cocinar sin electricidad, pero tampoco conservar los alimentos. Por lo tanto, deberías vivir en un constante viaje al supermercado. ¡Ah, no! Quizá tampoco habría supermercados…
• No calentarte ni refrescarte. Otro de los aspectos que quizá no valoramos es la calefacción en invierno o el aire acondicionado del verano. ¡También necesitan electricidad!
• Estudiar en casa. Sólo podrías estudiar a las horas que hubiese luz solar. ¡Nada de quedarte repasando por las noches!